ACEPTACIÓN

Aceptar, dice el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española:

del latín acceptāre - recibir -

"Recibir voluntariamente o sin oposición lo que se da, ofrece o encarga"

Parecería algo muy fácil de hacer y sin embargo nos cuesta mucho.

Practicar la aceptación es un gran acto de generosidad, que va más allá de nuestros propios deseos, ideas, gustos, planes, etc. Y nos cuesta por esa casi necesidad que tenemos los humanos de controlar, imponer nuestras creencias, nuestras ideas y lo que queremos hacer.

Y estamos hoy en un tiempo, en el que es más evidente que en cualquier otro que hayamos vivido, que aceptar debería ser nuestra primera opción. Estamos viviendo un momento inesperado, no planeado, que nos ha sacado a todos de nuestras rutinas, nuestros planes y ha cambiado nuestra manera de transcurrir los días.

Aceptar nuestra realidad actual, aceptar que los planes que teníamos se han pospuesto o cancelado, aceptar que hay actividades que nos gusta hacer que hoy no podemos, aceptar que cada uno de nosotros tiene su lado luminoso y su lado oscuro. Y que así como nuestra luz se ha manifestado en estos meses, la oscuridad también, la nuestra propia, de nuestros familiares, pareja, amigos y compañeros de trabajo.

Cuando no queremos aceptar, en muchos casos, nuestra reacción inicial es pelear, batallar para cambiar aquello que vino a "incomodarnos". E irónicamente esta reacción sólo le va a dar más fuerza, y va a potenciar eso que es no-aceptable para nosotros. Nos va a desgastar y probablemente no desaparezca. En otros casos es la negación, reacción que también nos va a desgastar enormemente y, de nuevo, no hará que lo que nos incomoda desaparezca.

Aceptar requiere fuerza de voluntad de nuestra parte, proviene de una decisión madura y puede implicar un trabajo personal adicional y actuar en consecuencia con eso que decidimos aceptar. Y aquí voy a aclarar que aceptación NO es resignación. El primer beneficiario de la aceptación somos nosotros mismos, como pasa en el caso del perdón, es ante todo un regalo personal. Cuando llegamos a la aceptación, hay una calma dentro nuestro que nos llevará a reconocer que la "pelea" ha terminado y que ya no es un asunto que requiera de nuestra atención ni nuestra energía, simplemente ahí está y listo.

Les quiero compartir un mudra, que está en la imagen que acompaña este escrito, para que lo utilicen y ayude en sus propios procesos de aceptación: de ustedes mismos, de este tiempo en el que nos encontramos, de quienes están a su alrededor o de cualquier situación que tengan en sus vidas. Los invito a que lo utilicen en una pequeña meditación de 3 minutos por 21 días seguidos, tomando como intención aquello que quieran aceptar y esté costando trabajo.

Para el Mudra de Aceptación:

  • El dedo índice de la mano derecha toca el pulgar de la mano izquierda.
  • El pulgar de la mano derecha reposa sobre los dos anteriores.
  • Los demás dedos de la mano izquierda envuelven los dedos medio, anular y meñique de la mano derecha.
  • Los dedos pulgares apuntan hacia el cielo.

"Nada derrumba los muros más rápido que la aceptación. - Deepak Chopra"

 

ACCEPTANCE MUDRA

Imagen tomada de:

Hand Book On Union With God Through Finger Postures - Aparna Choudhuri

 

¡Escríbeme! / Get in touch!